miércoles, 10 de agosto de 2016

La caza del cerdo de los pantanos, por Harper.

En la foto tomada por Leoncio Marugán en 1908 en el Pozo de Manolita, se aprecia a numerosos vecinos de La Bárcena y Ampuero tras la captura de un enorme ejemplar del chón de los pantanos.

 Al caminante le vienen recuerdos de aquellas conversaciones al calor de la lumbre de la cocina. En los más ancianos permanece en la memoría la caza de aquellas criaturas salvajes, animales ya extinguidos en la península ibérica, que vivían en las riberas de los ríos y en los cañaverales próximos. Alcanzaban tamaños formidables por ello para capturarlos acudían todos los vecinos sanos al toque de la campana de la iglesia. Eran más peligrosos que toros de lidia y cuando se conseguía matar uno se festejaba por todo lo alto porque suponía que todos los miembros de la comunidad llenaban las despensas. ¡Qué recuerdos!

 

 

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario