EL RINCÓN DE GARPER
AMPUERO
Y EL MOVIMIENTO YE-YE DE LOS AÑOS SESENTA
Ampuero también vivió el movimiento ye – ye
con intensidad en los años sesenta. Golpe a golpe y verso a verso, como diría
el poeta, haciendo historia de Ampuero. Y si viajamos al recuerdo, realizando
un viaje de cincuenta años al pasado y echamos la vista atrás, llegamos a la
década de los sesenta del siglo pasado con el protagonismo del movimiento ye –
ye.
En aquella época dorada Ampuero contaba con una buena banda municipal de música dirigida por el gran director Gurruchaga. Coincidió con la llegada de la orquesta Bego que estuvo varios años amenizando el baile los domingos y en fiestas. El estudio fotográfico de Marugán seguía con su esplendor. Gerardo Matas iniciaba su trabajo de fotógrafo en Ampuero. Mariano Gómez y su mujer Carmina emprendían su negocio de Helados Gómez. El Descenso Internacional alcanzaba sus cotas más altas con el protagonismo de los alemanes Helmut Herz y Rudy Grumberg. En dicho día se celebraba La Fiesta de La Montaña. Los encierros estaban en unos años exitosos. Alfredo Irusta triunfaba en Ciclo Cross. Santisteban se erigía en el mejor ciclista ampuerense de todos los tiempos. Nuestro primo y vecino de La Bárcena Andrés Núñez Cedrún se proclamaba Campeón de España de cros para militares en 10.000 metros. Ampuero contaba con un plantel de excelentes educadores (La Señorita Nati, don Dionisio García, don Luis Vidal, don Martín Inchausti y las Hermanas del Colegio de Santa Ana). El Campeonato de España de Pasabolo que se celebró en la Nogalera en 1964, organizado por la S. D. Peña Revilla, en tiempos de Efraín Ruiz Echevarría, resultó el más brillante de todos los tiempos. El comercio y la feria del primer sábado de mes se mantenían con buenos resultados, lo mismo ocurría con cafeterías, bares y restaurantes. Los sacerdotes don José y don Germán trajeron de la mano del Concilio Vaticano II una nueva forma de hacer Iglesia, especialmente siguiendo La Doctrina Social de la Iglesia. De otros apartados hablaremos en sucesivos recuerdos, porque seguiremos con: Abuelo, abuelo,…cuéntame cómo pasó…
(Supongo que pronto llegará la segunda parte del artículo pero antes estaría bien conocer los nombres de los integrantes de The Klins)
En el presente año celebramos la edad de oro
de este movimiento, que tuvo en el año 1965 dos acontecimientos de
consolidación de la juventud ye – ye: La venida a España de Los Beatles y la canción
“La chica ye – ye”.
El famoso grupo británico compuesto por Paul
Mc Cartney, John Lennon, George Harrison y Ringo Starr, viaja por primera vez a
España para dar dos conciertos, uno en la Plaza Monumental de Barcelona y otro
en Las Ventas de Madrid. La “beatlemanía” comienza a arrasar en España y surgen
grupos “pop” que intentan imitar al cuarteto de Liverpool. Ese verano,
curiosamente, la canción más escuchada fue “La chica ye – ye” interpretada por
Concha Velasco.
Aunque la corriente ye – ye, donde más se
reflejó fue en la música, en el interior de esta manifestación musical había un
movimiento de cambio, de apertura y libertad. Se produjo un choque profundo de
generaciones que al final fue positivo y los que nos movíamos en aquellas
corrientes reformistas, poco a poco fuimos convenciendo a nuestros padres y
abuelos.
Ampuero no dio la espalda al mundo ye – ye,
que tantas connotaciones abarcaba, presentándose bajo el estandarte de la
música “pop” que Los Beatles extendieron por todo el mundo. Llegó la minifalda,
el bikini, el pelo largo y las patillas en los chicos. Fue la época de los
guateques y los teleclubes. La radio ofrecía unos preciosos programas
musicales. Recordamos al locutor de radio Cantabria?... Federico Llata Carrera
conduciendo magistralmente el programa musical La Caravana de la Alegría que en
aquellos años globalizaba a toda la juventud de nuestra región. La juventud
ampuerense se divertía al ritmo de aquella música, que al principio irrumpió
con incomprensión y rechazo por parte de las generaciones que vivían con sus
coplas, pasodobles, tangos..., hasta que llegó el twist, que tanto se bailó en
las fiestas de la villa ampuerense, baile que hizo de pórtico a la generación
ye – ye, con unos años intensos de lucha pacífica y respetuosa que tuvo su
cénit entre los años 1964 y 1968. Al final se fraguó la generación de la
transición pacífica, envuelta en una música un tanto tremendista pero que en la
actualidad se ha convertido en un tesoro musical que guardamos en nuestros
cofres de los recuerdos.
Y el cronista, mientras escribe este
entrañable recuerdo ampuerense, se sumerge en la música de Los Beatles
volviendo a vivir aquellos preciosos años de juventud ye – ye y lleva su pluma
al son de una de sus canciones favoritas: Yesterday. Los momentos inolvidables
de la época ye – ye le siguen fluyendo:En aquella época dorada Ampuero contaba con una buena banda municipal de música dirigida por el gran director Gurruchaga. Coincidió con la llegada de la orquesta Bego que estuvo varios años amenizando el baile los domingos y en fiestas. El estudio fotográfico de Marugán seguía con su esplendor. Gerardo Matas iniciaba su trabajo de fotógrafo en Ampuero. Mariano Gómez y su mujer Carmina emprendían su negocio de Helados Gómez. El Descenso Internacional alcanzaba sus cotas más altas con el protagonismo de los alemanes Helmut Herz y Rudy Grumberg. En dicho día se celebraba La Fiesta de La Montaña. Los encierros estaban en unos años exitosos. Alfredo Irusta triunfaba en Ciclo Cross. Santisteban se erigía en el mejor ciclista ampuerense de todos los tiempos. Nuestro primo y vecino de La Bárcena Andrés Núñez Cedrún se proclamaba Campeón de España de cros para militares en 10.000 metros. Ampuero contaba con un plantel de excelentes educadores (La Señorita Nati, don Dionisio García, don Luis Vidal, don Martín Inchausti y las Hermanas del Colegio de Santa Ana). El Campeonato de España de Pasabolo que se celebró en la Nogalera en 1964, organizado por la S. D. Peña Revilla, en tiempos de Efraín Ruiz Echevarría, resultó el más brillante de todos los tiempos. El comercio y la feria del primer sábado de mes se mantenían con buenos resultados, lo mismo ocurría con cafeterías, bares y restaurantes. Los sacerdotes don José y don Germán trajeron de la mano del Concilio Vaticano II una nueva forma de hacer Iglesia, especialmente siguiendo La Doctrina Social de la Iglesia. De otros apartados hablaremos en sucesivos recuerdos, porque seguiremos con: Abuelo, abuelo,…cuéntame cómo pasó…
(Supongo que pronto llegará la segunda parte del artículo pero antes estaría bien conocer los nombres de los integrantes de The Klins)
No hay comentarios:
Publicar un comentario